Los precios del oro subieron a su nivel más alto en más de dos semanas después de que nuevos datos mostraron que más de una cuarta parte de los EE. UU. han quedado desempleados desde que se produjo la pandemia de Covid-19.
A las 11:25 a.m. ET (15:25 GMT), los futuros de oro para entrega en el intercambio Comex subieron un 1,4% a $1,740.20 por onza troy, habiendo alcanzado anteriormente un máximo de dos semanas de $1,746.25. El oro al contado subió un 0.9% a $1,731.07 la onza.
Los futuros de plata subieron 2.4% a $16.05, mientras que los futuros de platino subieron 0.3% a $772.30 la onza. Después de haber derivado suavemente hacia abajo en una formación de banderines durante la última semana, el metal amarillo parecía haberse roto limpiamente a través de la resistencia de alrededor de $ 1,730.
El movimiento fue posible gracias a los datos de solicitudes de desempleo iniciales de EE. UU. de la semana pasada que totalizaron 2.98 millones. Eso fue inferior a más de 3 millones la semana anterior, pero muy por encima de las previsiones que se tenían de alrededor de 2,5 millones.
Los datos ayudaron a reforzar las expectativas, si no de tasas de interés negativas el próximo año, y al menos de un periodo prolongado de debilidad económica que requerirá un mayor apoyo tanto del gobierno como de la Reserva Federal.
La situación tampoco es mejor en Europa, donde las expectativas han crecido en los últimos días de que las tasas de interés del Reino Unido caerán por debajo de cero después de que el nuevo gobernador Andrew Bailey se negó a descartar la posibilidad en comentarios a principios de semana.
Mientras tanto, el Banco Central Europeo ha descartado cualquier sugerencia de que se asustará al aumentar sus compras de activos por el fallo del Tribunal Constitucional alemán la semana pasada que arrojó dudas sobre su capacidad para comprar bonos.
Los analistas de ABN Amro dijeron el jueves en una nota a los clientes que esperan una recesión de doble caída para la zona euro y una recuperación significativa solo en la primavera de 2021.
“Los riesgos de un periodo sostenido de moderada deflación ahora son significativos”, escribieron los analistas dirigidos por Nick Kounis. “Como tal, es probable que las compras de activos netos a gran escala formen parte del panorama de la eurozona en el futuro previsible”.
ABN también espera que el Banco de Inglaterra aumente su programa de flexibilización cuantitativa en 100 mil millones de libras en su próxima reunión de política en junio.
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